domingo, 24 de octubre de 2010

El Apache

Semblanza de Carlos Tevez

El Apache

Carlos Tevez nació hace 27 años en el Barrio Ejército de los Andes, más conocido como Fuerte Apache. Por eso, a Carlitos también lo llaman “el Apache”.

Con sólo 10 meses de edad, sufrió una quemadura que le dejó una cicatriz desde su cara hasta el pecho. Hasta hoy, se negó a borrarla con cirugía estética porque, dice, le gusta que lo quieran como es.

Empezó a jugar fútbol en las inferiores del Club All Boys. Debutó en primera en 2001, pero fue durante 2003, cuando tenía 19 años, que se convirtió en la revelación del Boca de Carlos Bianchi. A partir de entonces, el amor entre la hinchada y Tevez sería un amor correspondido con creces. Durante ese año, su equipo ganó nada menos que el torneo local, la Copa Libertadores y la Intercontinental.

En 2004, vistió la camiseta argentina y se consagró como goleador de los Juegos Olímpicos de Atenas. Desde entonces, ha sido convocado en numerosas oportunidades a la Selección Nacional.

Su relación con la prensa nunca fue fácil. Acostumbrado a no callarse nada, Carlos Tevez no fue una víctima sumisa de la crueldad que está alcanzando el periodismo deportivo, hasta llegar a niveles sólo vistos antes en los programas de chimentos. En 2005, cuando se conoció que se haría efectivo su pase al Corinthians de Brasil, Tevez declaró al diario Clarín: “la gente que no me conoce se deja llevar por lo que dice el periodismo y lastiman a mi familia. Y con eso me obligan a alejarme del país".

Si tiene pocos detractores, lo que estos nunca podrán endilgarle es el apelativo tan futbolístico de “pecho frío”. Carlitos corre, amaga, intenta incluso lo imposible y si no le sale, vuelve a intentar.

Pero el fútbol no es la única pasión de Carlos Tevez. También es un apasionado de la cumbia. Por eso, creó el grupo de cumbia villera “Piola Vago” junto con amigos del barrio. Actualmente, juega en Inglaterra en el Manchester City y alterna su actividad profesional con el despunte del vicio de la canción.

Como Diego Armando Maradona, Carlos Tevez es protagonista de una leyenda urbana que se repite y que podría resumirse así: el Apache cumplió el sueño del pibe. Nació en un barrio donde las posibilidades escasean y solamente el talento se convierte en el hada madrina que puede sacarte de la miseria. Por su origen humilde, Tevez es el ejemplo de salvación que activa la ilusión de miles que van a probarse a las escuelitas de los clubes grandes.

Se puede decir que zafó. Si no fuera por su talento, su destino podría haber sido parecido al de su hermano, al que le esperan 16 años tras las rejas acusado de robar un camión blindado. Por suerte, a veces la vida no es predecible. Eso es lo que hace grande una historia como la de Carlitos.